El sector químico, el primer exportador de la economía española, registró un incremento del 16,3% en su cifra de negocios en 2022, hasta rozar los 90.000 millones de euros, «no porque producimos más, sino que, lamentablemente, tenemos que producir más» para El incremento de los costes energéticos, ha confirmado Teresa Rasero, presidenta de la Federación Empresarial de la Industria Química Española (Feique) del gas, que “han hecho más daño que la crisis de 2008 y el Covid”.

Rasero ha reclamado una reforma del mercado eléctrico en la senta de la propuesta por el Gobierno español frente a la «insuficiente» y «decepcionante» realizada por Bruselas, con el fin de garantizar unos precios competitivos y predecibles a largo plazo, así como un mayor Volumen de ayudas para los sectores gasintensivos.

En la calle, la presidenta de Feique y su director general, Juan Antonio Labat, aseguraron que «unos» momentos excepcionales, como los actuales, precisan medidas excepcionales. «mercado eléctrico, desde aquí lo apoyamos», dijo.

Así, la industria química pide establecer precios regulados y plazos para las tecnologías inframarginales denominadas, la energía nuclear e hidráulica, así como para el conjunto de renovables adcritas al régimen Recore, lo que estima que permitiría disponer de 150 teravatios hora (TWh) anuales, volumen equivalente a la totalidad de la demanda de la industria española.

Igualmente, ponen el foco en el impacto por los derechos de emisión de CO2 que, con un precio medio que supera actualmente los 90 euros por tonada, incrementa en 40 euros por megavatio hora (MWh) el precio del mercado mayorista cuando entra en una central de ciclo combinado, apostando por cancelar temporalmente a estas plantas del pago de derechos de emisión.

En lo que respeta al gas natural, con precios a lo largo del año pasado nueve veces superiores a los que registraron en 2019 y que han puesto contra las cuerdas al sector, demanden más ayudas directas para las empresas gasintensivas en función de su consumo.

Rasero indicó que, a pesar de que se prvé que 2023 pueda terminar con unos medios precios de unos 48 euros el MWh, la situación sigue siendo “una condición difícil y que siguió siendo competitivo a la industria«.

Ventajas de los países vecinos

En este caso, estimó que los costes directos de unos 825 millones de euros se dirigieron efectivamente al sector su «insuficiente», Frente tiene los 1.000 millones de euros de Portugal, país con un nivel de consumo de gas más bajo de su industria, o los 25.000 millones de euros de Alemania, considerando que habrá que conseguir un nivel de uno de 5.000 millones de euros, en un nivel más siguiente al de las ayudas portuguesas.

Además, abogó por un modelo de descuento, también en la línea del existente en Portugal, de 40 euros/MWh en factura, tiene un precio mínimo de 30 euros/MWh que aplica directamente la comercializadora, a los que compensa directamente el Estado.

Por otra parte, Juan Antonio Labat dio por zanjado los Parones en la industria del sector arrastrados por los altos precios del gas natural vividos en 2022, ya que el entorno actual de precios y el alza en la demanda de Asia prevista permite volver a producir por precio. “Tenemos perspectiva de que todo el mundo pueda abrir, Quedará muy poco, algo por parones técnicos. De las que sabemos que están paradas en finales de marzo o principios de abril volverán a abrir”, dijo.

Asimismo, apunto que la subida de las cotizaciones sociales asumirá un coste de mil millones al año a las empresas del sector.

Destaco el crecimiento en los mercados externoscon una cifra de negociación que impulsó un 29,2%, hasta los 63.626 millones de euros, lo que situó al sector como el principal exportador de la economía española, aglutinando el 19,5% del total de las exportaciones industriales.

Por sectores, el comportamiento no fue homogéneo, con una química básica que se vio como la más impactada por esos altos costos de la energía, se produjo una caída de producción del 11,2 %, mientras que la química de la salud y la de consumo directo (productos de limpieza y perfumería) crecieron entre el 10 % y 6%.

En lo que se refiere al empleo directo del sector, crecimiento del 12,1%, hasta los 234,000 empleados directos, tendencia que fue perdiendo fuerza en el tercer y cuarto trimestre en sintonía con la caída de la producción. Junto con los empleos indirectos, supone el 4,6% de la población activa.