Oficiales de la policia nacional, en una operación conjunta con Interpol y Europol, han detenido, en el marco de la segunda fase de la Operación Coniferaun total de 23 miembros de una mafia de apuestas ilegales por el momento amano de partidos de las categorías inferiores del fútbol español, de la Liga Nacional de Gibraltar y de la Liga de Andorra. Entre los detenidos se encuentran varios futbolistas sospechosos de haber utilizado su cargo para condicionar el resultado de los partidos en los que participaron.

Los arrestos se han llevado a un cabo en varias provincias –Badajoz, Cádiz, Ciudad Real, Córdoba, Tenerife y Ciudad Autónoma de Ceuta– y se suman a las 21 detenciones que se produjeron en la primera fase del operativo. Actualmente investiga un total de treinta partidos de fútbol por este caso. Los beneficios generados se estiman en más de medio millón de euros.

Tras la investigación desarrollada en las dos fases, pendiente de los años 2021 y 2022, «se ha logrado la desarticulación total de la organización criminal dedicada a la realización de amaños deportivos en partidos de fútbol», según ha informado la Policía.

Él Dirección General de la Policía Nacional Explicó que algunos de los decretos vendían sus cuentas de juego para que los integrantes de la organización hicieran apuestas online en partidos amañados, consiguiendo ingresos entre 4.000 y 24.000 euros por cuenta de juego.

esta segunda fase de la investigacion se inició tras las detenciones y registros llevados à cabo tras la premierera fase de la operación, en la que detuvo a 21 personas en las provincias de Cádiz, Badajoz, Sevilla y Almería por presunta pérdida de una organización criminal, corrupción entre particulares en el ámbito deportivo y estafa a los operadores de juego. Esta operación, que se desarrolló en colaboración con Europol e Interpol, se centró en mejorar la competición de las categorías inferiores de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y la Liga de Gibraltar.

El análisis de los datos permitió a los investigadores profundizar en el modus operandi de la organización, identificando tanto a futbolistas que habrían participado en el amaño de partidos de fútbol vienen a personas que se encargaban de abrir cuentas de juego online y cuentas bancarias por las que circulaba el dinero de la organización. Este sistema de creación de cuentas y transferencias ha dificultado la trazabilidad del capital y la vinculación de los investigados.

La operación Conifera, que no afecta a ningún partido del fútbol profesional, comenzó en julio de 2021 tras una denuncia de LaLiga, quien utiliza la más avanzada tecnología y la inteligencia artificial para detectar este tipo de amaños en el fútbol. En concreto, La Liga presentó la denuncia ante el Centro Nacional Policial para la Integridad en el Deporte y las Apuestas (Cenpida), respecto al partido de la temporada 2020-21 entre el CD Gerena y el Conil CF. Actualmente la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta de la Policía (UDEV), en colaboración con la Dirección General de Ordenación Del Juego (DGOJ), Europol e Interpol, ha abierto una investigación sobre la práctica de 21 detenidos en las provincias de Badajoz, Almería, Cádiz y Sevilla.

LaLiga también elaboró ​​varios datos sobre los participantes manipulados en primer lugar en el Liga Nacional de Gibraltar y fueron enviados a la Policía, en el marco de la colaboración que leva a cabo con este cuerpo desde el departamento de Integridad y Seguridad de LaLiga, iniciado en el año 2015. Nacional de Gibraltar en los hechos.

Modo operatorio

Según ha informado la Policía, el modus operandi de l’organización criminal constaba de cuatro fases. Una primera en la que el deportista facilitó información interna de los equipos de fútbol, ​​​​lo que aportó a los integrantes de la organización y apostantes, una ventaja competitiva en cuanto al conocimiento de las alineaciones de última hora, descartes, sistema de juego, y otros aspectos que no son conocidos públicamente.

En la segunda fase se realizó un cabo el concierto de amaños deportivos, creando grupos de comunicación encriptados formatados por los líderes de la organización y los deportistas para gestas los amaños para obtener allí grandes beneficios económicos.

Durante la tercera etapa, vaya a cabo las apuestas deportivas tanto de manera online como presencial en casas de apuestas. Siempre que las apuestas eran tramitadas de manera online utilizaban identidades diferentes para evitar la interrelación entre los miembros del entramado criminal y cuando se hacían de manera presencial, se ejecutaban las apuestas por pequeñas importaciones para evitar que el cobro posterior del premio generase la emisión de certificados para la Hacienda Pública por parte de los salones de juegos.

Para finalizar las acciones fraudulentas, los líderes de la organización distribuyen las ganancias generadas durante las apuestas entre los deportistas involucrados y el resto de la trama.