30/12/2022 a las 12:30

HEC


Los productores reconocen que los consumidores pueden optar por consumir otras grasas vegetales

La baja cosecha de aceituna se produce a las cotizaciones, que se encuentran en máximos

El consumir de aceite de oliva perra sufre un importante bajar antes de los altos precios del producto, es decir en niveles máximos. Así lo detectaron el miércoles el sector olivarero a través de los representantes de las almazaras cordobesas, de las cooperativas, de administraciones como la Diputación Provincial de Córdoba y de entidades como Caja Rural del Sur, en la mesa de debate organizada por Diario Córdoba, del Grupo Prensa Ibérica, con motivo de la nueva Guía de almazaras de Córdoba que se distribuye este jueves con el periódico.

El 2023 se presenta «muy complicado», asesoró el presidente de Cooperativas Agroalimentarias en Córdoba y director general de Dcoop, Rafael Sánchez de Puerta. Tras unos niveles altos de comercialización este año, «no hay volumen para mantener esa cifra». Sí «afectará absolutamente a todo». Si el nivel de producción de la última campaña fue en 1.500.000 toneladas, el de la siguiente alrededor de 780.000 tonificado Cifras «absolutamente bajas para nuestras necesidades comerciales».

Máximos históricos

Estafa»los preciosos mas altos de la historia«, según comentó Belén Luque, presidenta de Almazaras Industriales de Córdoba, el sector prevé que la demande caiga pese a que no espera nuevas subidas de la cotización de gran relevancia. A menor producción, mayor valor y, por consecuencia, menor consumo de aceite . El único beneficiario de la subida de los precios, explicó Luque, es el agricultor, por quien se alegra, ya que verá compensada la mala cosecha. Sin embargo, «el consumidor es posible que busque otras grasas sustitutivas».

Respecto a los precios, para el presidente de la Diputación, Antonio Ruiz, la clave es que «se encuentra la oferta y la demande». Y, para ello, considera necesaria una apuesta fuerte por la promoción desde las instituciones. Hacia la misma dirección apuntaron el resto de componentes de la mesa. Sánchez de Puerta sugirió que «al final se tienen que encontrar ofrecido y demandado».

Entonces, como agregó Belén Luque, «no es que te quedes sin aceite», sino que al consumirse menos, la baja producción no se percibe directamente, sino que se reflejado en el valor de un producto encarecido al ser mas escaso. Esta situación, para las almazaras, «no son buenas noticias porque vamos a perder mucho mercado». A esta situación, hay que sumar los costes industriales que «están sí o sí» en las almazaras y las cooperativas. Desembolsos como el del gasto en electricidad que han multiplicado a raíz de la inflación y que, actualmente, parecen suponer un lastre para las empresas.

Un final de campaña positivo

El escenario previsto por el sector del aceite, que empezó a manifestare con el inicio de la campaña 2022-2023, contrasta con un anterior buen ejercicio. Él última campaña resultó «bastante buena», dice Ricardo López-Crespo, vicepresidente de Caja Rural del Sur. La alta producción coincidió con unas liquidaciones muy aceptables, apostilló Sánchez de Puerta. En términos concretos, unos tres euros y medio para el agricultor.

El año 2022 ha experimentado vaivenes continuos, marcados por fenómenos como la guerra de Ucrania, la huelga de transportistas o la sequía. Y, finalmente, la campaña anterior se cerró con buenos números también en comercialización, más allá de la producción y el valor de mercado, algunos de los problemas atravesados, comme la escasez de lluvias, podrían tener efectos de cara al año entrante. Las lluvias de diciembre, como celebraron desde el sector, han sido un alivio, pero los ojos estan puestos en la primavera.

Caída de las exportaciones

la cuota ganada por el sector del aceite de oliva en el mercado exterior puede verso frustrado en 2023. “El precio nos va a dejar fuera”, lamentó el presidente de Cooperativas Agroalimentarias. Si el ritmo de salida se encuentra en 139.000 toneladas mensuales, el año entrante podría oscilar entre 100.000 y 110.000. Por el contrario, Sánchez de Puerta apunta tiene una crecimiento de las importaciones.

En la misma línea, el presidente de Almazaras Industriales de Córdoba anunció que «las reducciones de salida van a ser drásticas». El problema de la escasa cosecha no ocurre solo en España, apuntó Luque, sino que se repite en países como Italia, Portugal o Túnez, excepto a Grecia. Los bajos niveles de comercialización que, desde el sector aceitero se prévén, apostilló Rafael Sánchez de Puerta, «lo vamos a padecer las industrias«.

Sin embargo, López-Crespo no coincide en que las exportaciones vayan a suponer un problema, el próximo año, para las empresas cordobesas. confianza es Estados Unidos para mantener unos al aire libre venta buenos de aceite de oliva, ya que, con la revalorización del dólar, «está tirando fuerte». Por el momento, subrayó el vicepresidente de Caja Rural del Sur, el país norteamericano mantiene un buen nivel de importaciones. Y descarta que vayan a disminuir las exportaciones en la provincia.